Franco
Este collar de acero cuenta con 60 cm de largo y 3 mm de grosor, con una particularidad de ser una cadena que cuenta con una especie de dimensión cúbica, por así decirlo, que le proporciona volumen a esta cadena básica que es totalmente un MUST HAVE dentro de tu colección de accesorios.
Historia de los collares
En todas las civilizaciones del mundo, los collares han sido una parte clave e importante en la joyería. Se cree que sus inicios se remontan a la Edad de Piedra, es decir, que esta pieza tiene unos 40 mil años de antigüedad aproximadamente.
Al principio, los collares solían ser decorados con moluscos, luego de piedra, huesos, conchas marinas y hasta dientes de animales, siendo estos últimos muy populares en aquella época.
Con el pasar de los años, gracias al descubrimiento del oro, la plata y diversos metales, se empezaron a fabricar collares más llamativos, los cuales estaban relacionados con la magia y el poder, ya que el collar tiene la forma de un círculo cerrado que evoca estos elementos.
Por otro lado, aún hay regiones en el mundo, que no solo utilizan los collares como un adorno personal, sino que son parte de la identidad de algunos pueblos, quienes lo utilizan como escudo de protección.
El acero como tal
El acero está considerado como el metal más fuerte que encontramos, esto le permite ser el material principal para muchos accesorios que están de moda como anillos o cadenas. Por otro lado, este material está catalogado como un amuleto contra las malas energías y combatir el estrés. A su vez, se comenta que las prendas de acero se convierten en un elemento protector para quienes lo utilicen.